El cabaco, Salamanca. 10 de agosto de 2011

Pues no vean ustedes que alegrón.
Ayer nos desayunamos con la noticia de que nuestra reportera más dicharachera: Eva Moreno, de Cadena Ser, venia a pasar una jornada titiritera con nosotros.
Que fenómena.

Preparamos comidita rica, pusimos una lavadora en el camping y, en lo que llegaba Eva, nos fuimos a dar un bañito a la poza de Mogarraz, a unos doce km de nuestra base.
Allí conversamos con un grupo de jóvenes belgas, todos con mochilas, todos con crucifijos, uno hasta con túnica y sandalias, que habían venido para las jornadas de la juventud con el Pápa.
Muy majetes ellos, muy buena gente, nos pidieron los nombres ya que como según nos dijeron al despedirse, rezarian por nosotros.
Buena falta nos hace...la verdad.
Eva llegó junto con "Ron", su cocker, después de comer.
Un cafetito y tras charlar un rato nos encaminamos al Cabaco donde, antes de actuar, visitamos el "Centro de interpretación de la minería romana", que conduce José, un muchacho muy apañadete que ha dejado atrás Madrid, para venirse al pueblo a vivir junto con Casti, su mujer, y su hijo Iñaki. Lo cierto es que se les ve muy contentos con el cambio de vida.
Les recomiendo que visiten el centro de interpretación, es muy interesante.

La plaza del pueblo se llenó de familias prestas a pasar un ratito majo con nosotros y como ayer, además, teníamos a Eva, sorprendimos a los vecinos con la presentación del espectáculo por parte de la reconocible y aterciopelada voz de Eva, que levantó aplausos al explicar la iniciativa "Títeres en ruta".
Los chavales participaron a tope de la función y los mayores se rieron un buen rato.
Nosotros lo disfrutamos mogollón, como siempre, aunque ya vamos acusando el cansancio.
Tras actuar, el ayuntamiento nos invitó a unos vinos y a embutido de la zona, que es soberbio.
Nos despedimos de El Cabaco, y no quisimos que Eva se marchara de la zona sin conocer un establecimiento que hemos descubierto en la zona, La teteria "Te-hace", en La Alberca, regentada por "Macu", una tipa encantadora y peculiar que se ha currado un garito espectacular, con una terracita divina rodeada de huerta y de plantas aromáticas.
Allí nos tomamos un copazo Eva y yo, un Mojito Cesar y una infusión "anti-catarral" Laura.
Nos obsequiaron con un plato de "turruletes" un dulce típico de la Sierra de Francia y allí estuvimos de "palique" hasta las tres de la mañana...ya saben...arreglando el mundo.Al despedirnos de Macu, nos vinimos a la caravana y nos tomamos "la última" antes de acostarnos.
¡Ah!, se me olvidaba...al llegar al camping, sorprendimos en la puerta principal del mismo a un ejemplar adulto de jabalí, hociqueando entre los arbustos.
Nos quedamos un rato en el coche, sin movernos y sujetando a Sola y a Ron para que no lo auyentaran.
Un espectáculo...igual lo fichamos.